¿Cuándo la piedra es piedra?
¿Cuando la palabra que la nombra,
o que lo intenta,
emula la solidez de lo nombrado?
¿Cuándo el orden es orden?
¿Cuando nos ponemos en fila y sin hablar,
con el guardapolvo blanco blanco,
en el acto escolar de lo habituado?
¿Cuándo la vida es vida?
¿Cuando crecemos, nos desarrollamos,
asimilamos y nos reproducimos
sin contar con el declinar,
la soledad y la muerte?
El sol disco furioso naranja se sumerge ya en un horizonte infinitamente curvo.
Los golpes sordos de los terrones negros contra la madera del cajón.
Las risas de una mujer y un niño, hoy inesperadamente felices.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
5 comentarios:
deformación profesional: ya que es una aposición, yo pondría entre comas la parte que dice: disco furioso naranja. besos
Mi parte preferida es cuando dice Sol disco furioso naranja, sin comas.
Poeta amigo no acepte críticas de los fiscales anónimos del universo. Siga adelante!!!
Un texto sin puntos ni comas sería de lectura fatigosa, confusa y equívoca, ya que la puntuación agrega información vital para el texto. Los signos de puntuación constituyen un mensaje que corre junto a las palabras para que estas sean legibles.
Dicho esto desde ningún lugar de fiscal del universo, sí, desde el lugar de una licenciada en letras que difruta de la lectura de Nacho.
amigos, no se me ofusquen por tan poco.
entiendo el aporte (y lo agradezco, desconocía u había olvidado el término aposición, que me parece muy simpático, por cierto, y me hace acordar a apócope, que debe ser algo parecido), es más, es algo que cambié un par de veces pero al final decidí no ponerle comas, me gustaba más reservarlas para la última línea, para hacer esa especie de quiebre que es la risa en ese contexto. En ese sentido quizás estemos de acuerdo con Juan.
la fiscalizadora anónima del universo informa por la presente no estar ofuscada, y hasta agradecer el título otorgado que será usado desde el día de la fecha.
Publicar un comentario